La concha de este caracol tiene forma cónica con 4 o 5 espirales, y es de color amarillento o marrón grisáceo con puntos o bandas oscuras. El diseño puede ser bastante variable.

El pie está hendido longitudinalmente, y cada una de las partes puede moverse por separado. Presenta un opérculo calcáreo y duro, que permanece siempre pegado a la parte superior del pie por la zona trasera. Con él se cierra herméticamente, de manera que puede conservar por mucho más tiempo la humedad interior.

Prefiere las zonas sombreadas y húmedas con suelos donde pueda excavar su madriguera. Tiene hábitos nocturnos, aunque puede verse activo de día en colinas húmedas.